lunes, 25 de enero de 2010

Dulcemente Azul.-

Y se que el tiempo es impreciso, y se que quizas tu vista nunca se toparan con estas letras o en realidad quien sabe. Fuiste, sigues y seguirás siendo muso hasta que el recurso no de más. Y es que en este dia lunes necesitaba decir esto, en este dia lunes agradezco que todo haya salido relativamente bien mirando tus ojos de otra manera, para la cabeza que tanto te pensó y que tanto temió de ti y tus pseudo acciones imaginarias. Temer entre comillas porque sabes bien como soy. Nunca digo nunca. El tiempo es mi mejor juicio.


Me rendí ante la gravedad
aún estando postrada en mi cama,
con mis ojos abiertos
apreciando las fugaces luces
que jugaban en mi techo,
lentamente se nublaba todo
perdiendo su figura,
su color y se volvió todo azul.

Dulcemente azul para ti,
como desde un principio,
 me recordó a la imagen
en ese bar con música adoc
ante mis sentidos,
mis manos inquietas buscando
algo que hacer
y la mirada esquiva de tus focos,
ruborizandome cada vez mas,
temiendo y sabiendo el paso siguiente,
 temiendo porque era la presa,
presa consciente,
presa buscando a mi atacante.

Y ahí estaba,
con el corazón en la boca,
con una sensacion tan extraña
que me apoderaba...
Gata indefensa,
ahí estabas,
acorralada ante el lobo,
lobo suave que tranquilizaba la sangre,
 la sanaba
y a la vez  en frenesí.

Azul, dulcemente azul,
cerré los ojos
y la gravedad hizo de la suyas
 en un perfecto trance,
sonaba Money
sentia el tambor de las valvulas
de tu corazón acelerado,
acelerado como el mi
 mientras comenzaban
a buscar la textura de tus manos.

Qué mejor refugio sabiendo
que era tan rápido y tan corto.
Sabiendo que de lo bueno poco
hay que aprovecharlo,
aun sabiendo que jamás amé de tal manera.

Y como saber el paso siguiente,
lo espontaneo me comió.
La simbiosis
fue la mejor cura ante
estas caderas morenas
sedientas del vino que le proporcionabas,
veneno liberador ante tus brazos,
ante tu ser,
porque tu ser me habla de eso
de la mejor manera en que tu puedes ser.

Libertad, tan sana y a la vez destructiva.
 Destructiva porque me carcome
el no tenerte mas cerca,
 pero sana a la vez de saber
que la alegria vuelve
a la sonrisa que me mata y me daba vida.

Eres plena contradiccion,
libertad, seguridad, inseguridad,
eres plena esperanza y ganas de vivir,
eres plena desesperacion...
desesperación ante el lobo que domó al felino,
hoy eres bestia, andante caminante,
bestia nombrada y aceptada
ante las situaciones confusas de la vida,
 ante la herencia máldita,
ante el karma que nos tocó vivir
porque si y porque no,
ante la maldición del elixir
que corre por tus venas.

Y es que eres la mejor maldición
queriendo escapar de "ti mismo".
Vete,
huye,
escondete de mi -
asi decias, para no hacerme sufrir -
Magna fue la sed,
magna fue las innatas ganas de estar ahí
que me tumbaron contra el suelo.

Me refugié,
me escondí
y te dejé marcas,
mechones de cabellos negros
en el camino para que no te pierdas en esta selva,
para que sepas donde estoy escondida
.
Dulcemente azul,
nuevamente mis ojos cansados
y duros vuelven a abrirse una ves mas.

Encantada estoy de verte tan bien,
encantada estoy
que las bestias no esten dentro de tu cuerpo.

1 comentario:

Matias dijo...

A veces me dan ganas de partirme en dos, a ver si el sol se ve distinto desde el otro lado...

Me agrada tu técnica, me recuerda a algunos textos que me dieron el la u, tal vez tu intención no sea mi percepción...pero esa es la magia ¿no!?

 Escribir para vomitar vomitar para eliminar eso que da vueltas por las tripas y la cabeza eso que me atormenta.